Top Gear está considerando seriamente iniciar una sección llamada “Estas nuevas marcas de superdeportivos con nombres improbables pero coches geniales”. Inferno y su “Exotic Car” definitivamente estarán en la lista.

Hace seis meses, México se propuso una (ambiciosa) misión: ser reconocido en el panorama automovilístico internacional. Los primeros pasos en este sentido se dieron en julio de 2015, cuando el fabricante VUHL presentó el “05”, una especie de barco biplaza al estilo Ariel Atom.

A principios de diciembre se alcanzó un nuevo hito. Recién nacido entre los constructores, Inferno presentó su “Coche Exótico”un coche de carreras que sólo el término “demasiado” puede describir.

Un cuerpo “estirado”

A primera vista, el diseño recuerda (demasiado) a una figura de Hot Weels. Es fruto del trabajo de Antonio Ferrarioli, que ha trabajado en numerosos proyectos en Lamborghini. A primera vista, la ficha técnica impresiona (demasiado). El V8 biturbo produciría 1.400 CV y ​​permitiría que este exótico coche acelerara de 0 a 100 km/h en sólo 3 segundos. La velocidad máxima, a su vez, sería de casi 400 km/h… (¡demasiado… loco!) Y aunque el mensaje parece claro ahora, vale la pena echar un tercer vistazo a la estructura de este monstruo. Una mezcla de zinc, aluminio y plata, por lo que sería “indestructible”. Recuerde que el chasis puede absorber golpes sin deformarse. En definitiva, un coche (demasiado) elástico. Si el Exotic Car no cae en el abismo de los proyectos surrealistas, debería entrar en producción el próximo año. ¡Muy emocionado!