Los legisladores mexicanos votaron el sábado para incorporar la Guardia Nacional al ejército para combatir el narcotráfico, derrotando las voces de la oposición que decían “el presidente más militarista en la historia del país“.
La reforma de la Guardia Nacional, una agencia de seguridad creada por el presidente izquierdista Andrés Manuel López Obrador cuando asumió el cargo a fines de 2018, fue aprobada por una votación de 265 a 212.
El texto, que será enviado al Senado para su aprobación final, ha desatado un animado debate en un país que se pregunta cuál es la estrategia adecuada para enfrentar el crimen organizado.
La reforma colocaría a la Guardia Nacional bajo la autoridad de la Secretaría de la Defensa (Ministerio). La Guardia Nacional depende actualmente de otro ministerio, aunque sus 115.000 miembros son en su mayoría militares.
“El objetivo final no es la militarización del país ni el autoritarismo“, según el proyecto de ley, pero de”fortalecer“Guardia Nacional”como policía permanente“.
“Mentiste a los mexicanos prometiéndoles que los militares volverían a sus cuarteles‘, acusó un representante del Partido Acción Nacional (PAN, oposición liberal-conservadora). Señor López Obrador”es el presidente más militarista en la historia del paísagregó otro diputado del PAN, Jorge Triana.
El presidente entregó el control aduanero en 2021 al ejército. Obras mayores (segundo aeropuerto de México, tren turístico en Yucatán) también fueron encomendadas a los militares.
“El ejército es el pueblo uniformado.‘, repite a menudo el presidente López Obrador.
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