El Centro de Sismología revisó la magnitud del terremoto del 6.9 original a 7.1. El Centro de Alerta de Tsunami del Pacífico de EE. UU., que inicialmente había advertido sobre el peligro de un tsunami en el Pacífico, anunció unos minutos después que no se temía ningún tsunami.

Hasta el momento se han registrado tres réplicas, siendo la más fuerte de magnitud 5.

“Un hombre murió porque le cayó una estaca en el municipio de Coyuca de Benítez”, dijo a Milenio TV el gobernador del municipio, Héctor Astudillo, en el estado de Guerrero (sureste).

El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, dijo en un comunicado que solo “cayeron piedras de los muros, lo mismo en Morelos (centro), sin daños en Oaxaca (sur), sin daños en Puebla (centro)” y sin daños en México.

La alcaldesa de Acapulco, Adela Román, informó que “la gente ha tenido crisis nerviosas y está preocupada porque es posible que haya réplicas”.

También dijo que se habían reportado “numerosas fugas de gas” en áreas residenciales.

La alcaldesa de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, tuiteó sobre los cortes de energía en la capital. Ella dijo que el sistema de tránsito todavía está operativo. Según varios periodistas de la AFP, el temblor duró menos de un minuto y se sintió con fuerza en toda la capital.

Un video captado por un reportero de la AFP en el aeropuerto de la Ciudad de México muestra la magnitud del sismo, con vallas publicitarias electrónicas balanceándose violentamente.

El último gran terremoto en México, también con una magnitud de 7.1, ocurrió el 19 de septiembre de 2017. Se cobró la vida de 369 personas. En 1985, un terremoto de magnitud 8,2 mató a 10.000 personas.